domingo, 30 de junio de 2024

JULIO 2024.
INICIO. Entre aplausos y gritos, las competencias de natación son una gran atracción y en ellas participa alguien muy querido por la gente: Gibrán Isunza, un atleta que se ha preparado para ganar pero que esta vez, como en muchas otras, es vencido por su máximo rival, el arrogante Roger Dalmacci, quien al final, en las bañeras, no hace más que burlarse de él. Lleno de frustración, Gibrán cae en sus provocaciones y se le va encima mientras otros competidores disfrutan, entre ellos el gran amigo del nadador: Chavo Olaya, el cual hace tiempo se prepara también en la natación y el cual vive con su abuela, doña Paquita, la cual ha cuidado de él desde que quedó huérfano y le gusta jugar canasta con sus amigas, Queta y Matilde, con quienes hace una visita a una casa de retiro conocen a Barbara Bécquer, una singular y extrovertida mujer que les asegura que aún son jóvenes para pensar en el retiro y las invita a jugar canasta a su casa, donde les cuenta de los negocios millonarios que ha hecho, haciendo que gente de mundo haga mucho dinero al invertir con ella, dejándolas anonadadas con todas sus andanzas. 
 
Chavo, fiel a Gibrán, intercede en su pleito con Roger, pues está convencido de que no vale la pena pelear a puño cerrado ni con los insultos habituales, sino en la competencia, recomendando a su amigo que se prepare todavía más, para vencer al otro en la próxima competencia. Lo apoya Santos Martell, el entrenador, mismo que asegura a Gibrán que debe tener más disciplina y dejar de lado los problemas personales, pues aunque sabe que ha puesto su mejor esfuerzo, en el fondo no lo ha dado todo, así que le recomienda nadar en otro tipo de competencia, pero el protagonista solo tiene una meta en mente: vencer a Roger a como de lugar, pues es el hijo del hombre al que cree culpable de la muerte de su madre y le tiene una enorme rabia desde que le arrebató el amor y el cariño de Ilithya, la chica de quien él siempre ha estado enamorado. Y es que desde que era todavía un niño, Gibrán es huérfano de madre y desde entonces su padre, Vicente, se convirtió en un hombre duro y exigente, para el cual el hijo no es más que un soñador destinado al fracaso. Por eso, al saber que este no ganó la competencia, le da la espalda y dice sentirse defraudado de él, pues esperó en el pasado que fuera un ganador y se equivocó. Lo cierto es que Vicente es un hombre frustrado que nunca pudo lograr sus sueños y por ello soñó verlos realizados en su hijo, el cual a veces siente que no lo quiere y cuenta esto a sus amigos y colegas, Chavo y Aldo, quienes lo apoyan. 
 
Aldo es un muchacho de familia acomodada que junto con su hermana Romina padece los conflictos maritales de sus padres, los cuales ante ellos fingen que todo está bien pero se lo pasan peleando a sus espaldas, pues el progenitor, José Luis, viaja constantemente por varias semanas, con el pretexto de su trabajo como ingeniero y la esposa, Mónica Galicia, está cansada de su ausencia. Es por ello que el hijo mayor ha encontrado refugio en la música y sus amigos, mientras que la hija menor vive obsesionada con las redes sociales, donde finge una vida que no tiene, además de ser a escondidas novia de Aldo, con el que ya mantiene relaciones íntimas. 
 
Roger celebra su triunfo con los suyos y, delante de todos, Ilithya le pide que no moleste más a Gibrán, despertando la furia del novio, quien le pregunta si todavía sigue interesada en él y amenaza con terminar con ella, que lo reta a que lo haga, poniéndolo a prueba. Para darle un escarmiento, acude al protagonista para darle un beso y un abrazo de consolación, despertando los celos del novio, el cual desahoga con su fiel amigo, Darío Uribe, el odio que siente hacia su eterno rival, desde que eran unos niños.


Por su parte Gibrán le pide explicaciones a su ex novia, quien le asegura que solo puede verlo como amigo y no como lo que él desea, desde que se enamoró del otro, que de nueva cuenta le arma pleito, por lo que los amigos de ambos intervienen. Esto lleva a Gibrán a sincerarse con Ulises Mitre, la mano derecha del entrenador Martell, al que dice sentir que este último no muestra interés en su entrenamiento debido a que su prioridad es la escuela de natación. Le pide apoyo para poder vencer a Roger en las próximas competencias nacionales y este se lo promete y luego se lo comunica a Santos, al que asegura que el protagonista está empeñado desde que su rival le arrebató el amor de Ilithya, y que siempre y cuando la rivalidad sea por amor, el atleta tendrá la fuerza suficiente para luchar por el campeonato. 
 
La enferma y atormentada Helena agoniza llena de lamentos mientras que su hermana, la cruel Diana Montero, le pide que termine de morir y deje de hacerle la vida difícil. Le jura que hará de su hija, Ilithya, una réplica de ella, que debió ser su madre. Cuando la muchacha llega a casa, la malvada tía la consiente y le informa del mal estado de su progenitora. La joven se muestra indiferente y asegura que a ella solo le importa su padre, Fernando Lafranco, a quien la tía entera de la insensibilidad de su hija ante la tragedia de Helena. El hombre habla con su consentida, quien le dice sentirse sola desde que su madre enfermó, pues todos centran la atención en ella. Él le pide que no sea egoísta y comprenda lo duro que es el padecimiento de la mujer que le dio la vida, pero ella, egoísta, insiste en mostrarse indiferente, lo que en realidad da gusto a Diana, la cual ha sido sumisa y bondadosa con la familia de su hermana, por conveniencia, pero dentro de su alma guarda una oscuridad y crueldad que nadie se imagina. 
 
Nubia Ramos ha llegado a vivir a la ciudad y se ha instalado en la pensión de doña Matilde Buenrostro, quien le asegura que, aunque todos llegan esperanzados en busca de una calidad de vida en la capital, pocos lo logran, puesto que ya son demasiados habitantes luchando por el mismo sueño. La recién llegada, poseedora de gran porte y belleza, tiene fe y voluntad, así como grandes deseos de salir adelante y encontrar la verdad que ha ido a buscar a la ciudad, por lo que luego de inscribirse en la universidad, busca trabajo y es presa de la infamia masculina, pues los hombres desean aprovecharse de ella, que se hace amiga de la nieta de Matilde: Ángela Álvarez, una chica buena que le advierte que no debe confiar en todas las personas, pues hay demasiada desigualdad social y estatutos en el lugar que residen. Aun así la protagonista conoce a Ilithya y se hace su amiga, a pesar de que a la otra, su mejor amiga, Celeste Acuña, le asegura que la recién llegada es una arribista sin clase, a la que muestra total indiferencia. 
 
Barbara tiene una fuerte discusión con su marido, Reinaldo Higareda, pues este le dio todo su dinero para invertirlo y ella no le ha pagado un solo centavo. La mujer asegura que pronto le dará el dinero y se comunica con su socio en la CDMX, quien le promete que pronto le dará la fortuna que invirtió y la alienta para que invierta y recupere más rápido la inversión de su marido, el cual no deja de reprocharle el haberle visto la cara y desahoga sus frustraciones con la sirvienta, Aristía, quien pone al tanto a la esposa de la furia del marido. Barbara entonces decide valerse de Paquita, Queta y Matilde y las invita a jugar canasta, tratando de convencerlas de que invertir sus ahorros les haría ganar mucho dinero. 
La primera interesada es Queta, quien hace preguntas a Ulises, su hijo, el cual le deja claro que no necesita arriesgarse con inversiones, pues cuenta con él y nada les hace falta. Ella sin embargo está convencida de que no es tarde para jugársela. Lo comenta con Matilde, a quien Ángela le advierte que las intenciones de Barbara son buenas pero no debe fiarse de ella.
 
 
Vicente tiene amistad con su despampanante vecina Leticia Toscano, dueña del bar en el que Gibrán trabaja y que procura al hombre desde que quedó viudo y la cual está interesada en él, que e pide que no se preocupe ni por él ni por su hijo, puesto que ambos han aprendido a arreglárselas sin una mujer. La dicharachera mujer sin embargo no hace caso pues en realidad está interesada en el hombre, quien nota que le coquetea, pero siempre la ignora e insinúa que él solo va a amar a una sola hembra: Su difunta esposa. Ambos recuerdan como la mujer murió en el hospital intentando dar a luz a su segundo hijo, el cual también murió debido a lo que el hombre cree que fue una negligencia médica del Dr. Humberto Dalmacci, el cual se amparó y nunca aceptó su responsabilidad en los decesos. Este resentimiento de Vicente hacia el médico se le ha transmitido a Gibrán, quien visita la tumba de su madre y le jura que, al menos en las albercas, él demostrará que vale más que el hijo del hombre que les arrebató la vida a ella y su hermanito. 
 
Santos y Ulises son presas de los caprichos de Roger, quien en todo momento, en la escuela de natación, busca molestar y sobajar a Gibrán, al que el entrenador asegura que si cae en los juegos de su oponente entonces lleva las de perder, por lo que le aconseja que guarde esa furia para las próximas competencias y le de un escarmiento. Pero Roger insiste en burlarse del desempeño de su más grande rival, insinuando con humor que este desea ganarle para cumplir una promesa a su madre muerta, despertando la ira del muchacho, que lleno de furia lo golpea al grado de tener que ser detenido por Santos y Ulises, los cuales le recuerda que no puede reaccionar así y menos ante los demás, con quienes Gibrán se disculpa, para entonces recibir un masaje por parte de Ulises, el cual le pide serenidad y no caer en provocaciones y mucho menos en las de Roger, quien le jura a Darío que el muerto de hambre de su rival se las pagará por los golpes que le dio, pues lo detesta desde que eran unos niños. Lo ha escuchado Aldo, el cual de inmediato le dice a este los planes de su gran rival, el cual revela que el odio es mutuo y con lágrimas en los ojos asegura que no descansará hasta vencerlo. 
 
Diana maltrata a Helena y le confiesa su deseo de verla muerta para entonces, por fin, ser la única mujer en la vida de Fernando, convertirse en su esposa y tener la felicidad que la moribunda le arrebató. La enferma pide perdón a su hermana por haberle hecho daño sin quererlo pues jamás supo de su amor por el marido. La villana sin embargo insiste en atormentarla y promete que Ilithya será la que pague las consecuencias de su dolor y amargura, asegurando que hará de su vida un infierno. 
 
Ilithya y Celeste llevan a Nubia a conocer las albercas de la escuela de natación de la universidad y se encuentran con Roger, quien las sorprende por su cara golpeada. Ilithya le pide que le diga qué pasó y, aunque este desea ocultarlo, a Darío se le suelta la lengua y cuenta lo que sucedió y por qué sucedió. Nubia pregunta quién es Gibrán y las chicas le aseguran que es un animal que todo lo resuelve a golpes. 
Ilithya pide a Celeste que la acompañe a buscar a Gibrán, en su casa, pero esta se niega por lo que la popular chica le pide el favor a Nubia, quien sedienta de hacer amigas, acepta y acuden a la morada del protagonista, al que la ex novia exige que deje de atacar a Roger y no lo culpe por la muerte de su madre o porque ella lo haya preferido. Gibrán se contiene por la presencia de Nubia, a quien no conoce, mas se aleja con Ilithya y le dice saber que prefirió al rico por encima de él precisamente por eso: Por dinero, porque con él no puede darse la vida que se da con el otro, el cual la ha hecho crecer en popularidad, sobre todo en redes sociales, que es lo único que a ella le importa. Aparece Nubia delante de ellos y pregunta si todo está bien e interviene para asegurar al muchacho que la violencia no se disculpa por ningún motivo, y que la venganza solo lleva a crear conflictos internos que hacen daño a quienes tienen sed de ella. Se sorprende cuando Gibrán le exige que, si no lo conoce, entonces no se meta en lo que no le importa. Ella simplemente se marcha y se desahoga con Matilde, a la que sorprende cuando le deja entre ver que la verdad sobre su presencia en la ciudad es porque busca una verdad y hacer justicia. Revisa su teléfono y ve que tiene muchas llamadas perdidas de su madre, a la que no contesta, jurando que esta no la detendrá.
 
 
Paquita y Matilde quedan anodadadas cuando Queta les dice que ha invertido todos sus ahorros y que dentro de poco Barbara la hará recuperar el doble, por lo que organiza una tertulia en su casa e invita a la mujer, la cual intenta convencer a las otras dos de que invertir es lo mejor. Estas sin embargo dudan de hacerlo luego de que Ángela habla con ellas y les aconseja que aguarden a ver qué pasa con la inversión de Queta. Por ello Barbara acude a la chica y le pide que no se meta en sus asuntos y la joven le hace saber que duda de que sus negocios sean sinceros y no piensa permitir que su abuela pierda su patrimonio. Por ello hace que Matilde le prometa que no se arriesgará. 
 
Aldo descubre a Mónica llorando y está convencido de que esas lágrimas son por causa de José Luis, a quien el hijo exige que deje su trabajo y busque establecerse de manera definitiva en la ciudad. Él lo abraza, le asegura que quisiera hacerlo, mas no puede, ya que en ninguna empresa le pagarán lo que él gana trabajando por su cuenta. El hijo se ofrece a acompañarlo a uno de sus viajes, pero el progenitor se niega a llevarlo, exponiendo pretextos y argumentos que solo enfurecen al muchacho. El hombre entonces desahoga su sentir con Romina, a la que promete que dentro de poco estarán juntos para siempre, jurando que solo está juntando el dinero suficiente para poder retirarse a tiempo y pasar con su familia el resto de su vida. La muchacha lo abraza y luego pide a Mónica que no sea dramática ni preocupe a Aldo, pues saben que José Luis siempre va y viene y a ellos no les ha faltado nada, nunca. Se sorprende cuando la madre le responde que a ella siempre le ha hecho falta un esposo que esté a su lado en todo momento, así como a ella y Aldo les ha hecho falta un padre que los acompañe en sus triunfos y derrotas, en sus alegrías y tristezas y en todas sus enfermedades. Con ello, la mujer demuestra lo sola que se siente, y rechaza al cónyuge en la cama. Este entonces alista sus maletas y parte durante la madrugada. 
 
Nubia se topa con Gibrán en la universidad y así conoce a los amigos de este, que se disculpa con la chica por la forma en que antes la trató. Ella le dice ser nueva y él le aconseja que se aleje de Roger, el cual suele jugar con todas las chicas lindas para luego botarlas, como si fueran basura. Queda atónito cuando la chica le pregunta si él es distinto a los demás, pues por su carácter parece agresivo. 
 
Humberto Dalmacci siempre ha sido un hombre dominante y exigente que hace saber a Fernando, de quien toda la vida ha sido gran amigo, estar harto de los arranques y excesos de su hijo Roger, quien no conforme con ser un irresponsable que solo gasta su dinero, parece no tener un futuro prometedor, aunque sea bueno para las competencias de natación. El amigo le hace ver que el hijo solo vive las consecuencias de su consentimiento como padre y su intransigencia como marido, pues jamás ha permitido que su esposa, Andrea, tome decisiones sobre su primogénito. Se sorprende cuando el doctor le asegura que la mujer solo es buena para hacerse cargo de la casa, pero en realidad no tiene una preparación ni profesión, por lo que no vale más que para lo que sirve una ama de casa. Lo cierto es que Andrea vive frustrada y arrepentida de haberse casado con él, que exige demasiado a su hijo, al que ella intenta acercarse, siendo siempre rechazada por este, que es reprendido por su padre cuando este se entera por Santos de los disturbios que siempre causa en las albercas. Le muestra los gastos que ha hecho durante el mes y decide recortarle el presupuesto, asegurando que, si de ahora en adelante quiere tener dinero, tendrá que ganárselo, trabajando en el hospital, junto a él, pues ha decidido seguir los consejos de Fernando, quien le advierte que, si no tiene mano dura, entonces Roger sí que se perderá y , por su distintiva arrogancia y prepotencia, no habrá quien le extienda una mano. El muchacho se resiste a trabajar, pretextando que debe entrenar para las competencias, pero Humberto ya ha dicho su última palabra y piensa ser implacable. El muchacho es consolado por Andrea, a la que echa en cara que nunca lo defienda, rechazándola. Ella se desahoga con la fiel sirvienta Carmen, la cual le asegura que llegará el día en que el marido y el hijo se den cuenta de lo injustos que han sido con ella, que es una santa y lo ha dado todo por ellos.
 
 
Barbara se siente acorralada y su socio le asegura que todo está bien y le hace un depósito a cuenta del dinero que le debe. Esto sin embargo no es suficiente para Reinaldo, el cual al hablar con Aristía, esta le hace ver que quizás les han robado en sus narices, por lo que el hombre intenta hacer ver a su esposa que los han estafado. Ella se resiste a aceptarlo y presiona a Matilde para que hipoteque la pensión y gane mucho dinero. La amiga sin embargo siente miedo de perder su patrimonio y le cuenta esto a Nubia, quien al saberla preocupada promete no decir nada a Ángela, pero lo hace y la nieta de la mujer de nueva cuenta enfrenta a Barbara. 
 
Obed Mejía, gran amigo y cómplice de Leticia en el bar, aconseja a esta para que no pierda las esperanzas con Vicente, a quien ella ha amado desde que lo conoció. Hablan del pasado y la esposa de este, a quien ella conoció y supo atravesando por un embarazo riesgoso que la llevó a la muerte. Callan ante la presencia de Gibrán, quien tiene buen desempeño como mesero y barman y es popular entre las chicas, con las que a veces baila para animar el lugar. Al verlo desempeñarse tan bien, Leticia asegura a Gibrán tener la certeza de qu en realidad el Dr. Dalmacci no fue responsable de su deceso ni el de la criatura. Pronto son sorprendidos por Vicente, a quien ella ofrece un trago. Él le dice que se ha ganado una inscripción a una escuela de baile, pero no tiene pareja con la cual asistir, invitándola. Ella, presionada por Gibrán y Obed, acepta, encantada, y el amigo y cómplice le asegura que esto será lo que la lleve a conseguir el amor y la aceptación del hombre al que ha amado en silencio. 
 
Celeste entera a Roger de que Ilithya fue a buscar a Gibrán hasta su casa, por lo que el chico hace una rabieta y jura que el buzo se las pagará. Pide a Darío que no pierda de vista a Ilithya, pues él ha comenzado a trabajar para complacer a su padre y no puede controlarla. Sin embargo al verla le reprocha el que haya buscado a su ex y ella le explica que fue él la razón por la que lo hizo, pero el celoso novio no le cree y le jura que no va a permitir que juegue con él. Se violenta a tal grado que la hace sentir temor. Luego ella le reprocha a Celeste el haber traicionado su amistad y esta muestra estar celosa de Nubia, por lo que le pide a la amiga que se aleje de ella, pues la recién ingresada a la universdad no le da confianza. Ilithya sn embargo deja claro que ella escoge a sus amigas y propone a Celeste que, si no está dispuesta a aceptar a Nubia, entonces terminen su amistad.
 
 
Santos hace saber a Gibrán que habrá una competencia en la que desea inscribirlo. Él acepta con la única condición de que también inscriba a Aldo, el cual también acepta. Pronto Gibrán se ve en apuros cuando Nubia cae a una de las albercas y al entrar en pánico casi se ahoga, por lo que él la pone a salvo. Le da respiración de boca a boca y se asusta al ver que no reacciona. Se la vuelve a dar y entonces ella ríe, para decirle que tiene labios suaves y que seguramente besa bien. Le agradece el haberla salvado y le confiesa que nunca aprendió a nadar, por lo que él se ofrece a enseñarle. La lleva hasta la pensión de Matilde, quien siente gusto de conocerlo. Él invita a Nubia a tomar algo y ella acepta, hasta que terminan en las albercas, donde él comienza a darle clases de natación. Terminan besándose. Luego Gibrán cuenta a Vicente que ha conocido a una muchacha y este le recuerda que hace poco estaba muy enamorado de Ilithya. Le aconseja que use su suerte con las mujeres y se case con una rica que lo saque de la miseria en la que viven, cosa que no logrará nadando. Gibrán sin embargo defiende sus ideales y asegura que él no tiene por qué correr con la misma suerte que su progenitor, al que asegura que no descansará hasta ganarle a Aldo, así tenga que retar al destino. 
 
Luego de practicar masajes a los nadadores, Ulises toma una ducha en las regaderas de la escuela de buceo y es sorprendido por Aldo, el cual se muestra nervioso ante la situación. Luego se encuentran en los vestidores, donde el alumno está enteramente desnudo y más tarde en el estacionamiento de la universidad. Ambos se atraen mas ninguno se atreve a confesárselo al otro, evitando dejarse llevar por la pasión. Aldo entonces intenta hablar con Chavo , al que busca, y así descubre que este y Romina tienen un romance. Los enfrenta y el amigo le asegura que la relación es seria, mas la chica le exige que no se meta en su vida. El hermano se la lleva con él, a casa, y entonces doña Felícitas le recuerda a su nieto que ella le advirtió que las visitas de la muchacha no le traerían nada bueno y ahora por ella ha perdido a su amigo Aldo, el cual acusa a la hermana ante Mónica, la cual intenta reprender a su hija pero esta, rebelde, le exige que no se meta en su vida. La madre llora y desahoga con su hijo el sentirse sola. se asombra cuando él le pregunta por qué nunca se ha divorciado de José Luis, si finalmente él nunca ha estado ahí, para ellos, cuando surgen situaciones difíciles. Luego acude a Chavo y le exige que le diga si ha tenido intimidad con su hermana, enfureciendo cuando el amigo le dice que sí. El dolido Aldo decide romper relaciones con su amigo y se desahoga con Gibrán, el cual le asegura que Chavo no ha hecho nada más que enamorarse de Romina y eso no tiene nada de malo.  
Le hace ver que su hermana es atrevida e independiente, a demás de muy inteligente como para saberse cuidar. Aldo entonces llora y sincera con su amigo la presión que siente al tener que ser el hombre de la casa desde que es un niño, ante la ausencia de su padre.
 
 
Helena suplica a Fernando que cuide bien de Ilithya y no permita que se convierta en una mujer rencorosa como Diana. Este llama a su hija, la cual muestra indiferencia a su madre, quien luego de dales un beso a cada uno, muere, llenando al viudo de un profundo dolor que Diana desea curar con atenciones, pero su insistencia hace que el rechazo de Fernando hacia ella sea letal, por lo que sufre en soledad. Por su parte los amigos más cercanos de los Lafranco vienen a darles el pésame, entre ellos Gibrán, a quien Roger exige que se marche y no se acerque a Ilithya, quien esta vez exige a su novio que no le haga las cosas más difíciles ni ridiculice a su padre frente a tanta gente. Gibrán acompaña a Nubia y ambos se sienten ajenos a ese mundo por lo que acuden a dar un paseo y se toman de la mano. Hablan de lo difíciles que han sido sus vidas, así como de sus sueños, descubriendo que, aunque tienen ambiciones distintas, tienen muchas cosas en común. Las cosas se tornan misteriosas cuando él le pregunta por qué ha emigrado a la ciudad sola y nunca habla de su familia. La chica no tiene más remedio que confesarle que se encuentra en la capital no solo para culminar sus estudios, sino también para arreglar un asunto que durante los últimos años la ha tenido intranquila. Se niega a decir más, pero él la comprende y se atreve a besarla, siendo correspondido. 
 
Darío intenta enamorar a Celeste y hace saber a Roger que Gibrán se ha interesado en Nubia. El perverso muchacho convence a su padre de darle empleo a la muchacha en el hospital, a la que llama para que se presente a trabajar, como asistente. Ella se siente agradecida y da un beso amistoso a Roger, el cual al verla irse jura que un beso no será suficiente para pagar el favor que le está haciendo y por ello la trata con cordialidad, ganándose su confianza, pues ahora que sabe que esta y Gibrán se están conociendo, el quiere intervenir para seguir demostrando a su rival que está por encima suyo. Sin embargo la protagonista se ha ilusionado y se lo hace saber a Ángela, quien la anima para que corresponda al amor de Gibrán, asegurando que el muchacho es bueno y merece ser feliz con alguien como ella, que piensa que no es la indicada para él y deja entre ver que no se quedará en el lugar por mucho tiempo, luego de su cometido principal.  
 
AGOSTO 2024. Santos busca a Vicente y le hace saber que su negatividad afecta el rendimiento de Gibrán en las albercas, mas el padre considera que su hijo será un perdedor igual que él. El entrenador lamenta que piense así y le pregunta si no es que le tiene envidia y coraje porque ve en él gran potencial que a él siempre le ha faltado en la vida y por ello se niega a apoyarlo, temeroso a que logre lo que él no pudo. Furioso, Vicente exige al entrenador que se largue de su casa y cuando este sale se topa con Leticia, quien le pide paciencia, pues sabe que Vicente en el fondo es bueno y quiere a su hijo, mas no ha superado la muerte de su esposa. Santos entonces busca a Ulises para desahogar su frustración y se asombra al verlo besándose con un hombre más joven, sospechando que se trata de uno de los alumnos de la escuela. Luego le insinúa sus sospechas, cuando le dice entre palabras lo que vio. Ulises, descarado, revela que es homosexual y asegura que no ha hecho nada de lo que deba arrepentirse. 
Más tarde se topa con Aldo, al que decide seducir al mostrarse desnudo ante él y dirigiéndose a las regaderas, donde el chico, curioso, lo alcanza, mas no lo encuentra. Se lleva una sorpresa cuando el hombre aparece detrás suyo y lo abraza para entonces besarlo, por lo que al dejarse llevar, consuman su pasión con un apetitoso acto de erotismo.
 
 
Paquita habla con Mónica y la entera de las tardes que su hija Romina pasa encerrada con Chavo, en la habitación de este, así como temer a que los muchachos cometan un error y trunquen sus vidas. La desesperada madre de la chica llora ante la vieja, a la que dice no saber qué hacer pues no cuenta con el apoyo de su marido, el cual se la vive viajando. Se asombra cuando la anciana le asegura que esa situación le huele a que el hombre ya ha conocido a otras. La abnegada Mónica acepta que ella se teme lo mismo desde hace unos años, mas no tiene el valor de enfrentarse a esa verdad, ni a perder a su marido y dejar a sus hijos sin padre. 
 
Nubia y Ángela sufren un accidente del que la segunda resulta gravemente herida y deben operarla. Esto hace que Matilde tome la decisión de hipotecar la pensión y Paquita le aconseja que no lo haga, convencida de que los negocios de Barbara no son de fiar. Hablan con Queta, la cual las entera de que pronto recibirá el triple de lo que invirtió y convence a Matilde de arriesgarse, por lo que, ante las circunstancias por las que atraviesa, esta toma la decisión de hipotecar la pensión, pero no sin antes hacer que Barbara le firme un pagaré, llenándola de dicha. Sin embargo cuando Matilde le pide un adelanto para pagar el hospital de su nieta, la mujer se lo niega y le promete que pronto tendrá suficiente para pagar cualquier deuda que acumule. Preocupada, Matilde se desahoga con Nubia, quien entera a Gibrán de lo que pasa y este se vale de sus amigos para hacer una colecta y reunen el dinero suficiente para la operación de Ángela. 
 
Leticia tiene un incidente en el bar, pues un cliente alcoholizado intenta propasarse con ella y golpea a Obed, cuando este intenta defenderla. Interviene Gibrán, quien junto con unos colegas saca al hombre del lugar, obligándolo antes a pagar su cuenta. Acude a Leticia, quien se traga el susto y asegura estar bien. Luego el muchacho cuenta lo ocurrido a su padre, quien muestra indiferencia pero al estar a solas se comunica con la mujer, a la que acude en secreto para abrazarla y hacerla sentir protegida. Ella lo besa y se lo lleva a la cama, satisfecha luego de haber estado en sus brazos. 
 
Aldo hace las paces con Chavo y le hace saber que quizás Gibrán deba decidir entre la sus estudios, la natación y su trabajo en el bar de Leticia, pues aunados su trabajo y su pasión a todos sus problemas y al alcoholismo de Vicente, el joven no puede rendir ni darse abasto en ninguna parte. Luego le pregunta sobre su relación con Romina y el amigo le dice estar muy enamorado, mas no saber si quiera estar con la muchacha, la cual es posesiva, dominante y voluntariosa. Luego lo cuestiona sobre su reciente comportamiento, pues lo ha notado ausente, alejado de su grupo, como si quisiera estar solo. Nervioso, Aldo asegura tener problemas en casa y sospechar que su padre tiene otra familia, pues no encuentra un motivo más para que este decida dejar de viajar tanto. A su vez olvida sus problemas con Ulises, al que se entrega en cuerpo y alma, a escondidas. Sin embargo el profesor reacciona y le dice que lo suyo no puede ser. 
 
Reinaldo entera a Barbara de que lo han perdido todo, pues su empresa se fue a la quiebra al no tener un respaldo. Le reprocha el haberlo convencido de prestarse a sus juegos y ella está segura de que pronto recuperarán el dinero. Le entrega las pequeñas fortunas que Queta y Matilde le dieron, segura de que cuando le den sus ganancias de lo invertido les pagará a ellas. Aristía los ha visto y escuchado sin que se den cuenta y reprueba lo que su patrona hace, por lo que al encontrarse con Matilde, le insinúa que quizás no fue buena idea haber confiado en la nueva amiga, pues es posible que nunca recupere lo invertido. Asustada, la dueña de la pensión busca a Barbara y le pide que le devuelva su dinero, pues lo necesita ahora que su nieta está convaleciente, mas la inversionista le asegura que ya lo están trabajando y pronto recibirá su cheque con todo y ganancias.
 
 
Diana no se separa un solo momento de Fernando, al que da un masaje en los pies, de rodillas. Él le acaricia la cabeza y le agradece ser como un perro fiel. Le pregunta por qué nunca se casó y ella le dice que ha preferido cuidar de Helena, a quien le debe todo lo que es y a quien quiere como a nadie, además de que solo ha amado a un solo hombre. Él. Lo mira con seducción, lo besa y este la rechaza, pero entonces la mujer se desnuda y se suelta el cabello, asombrándolo. Se le abalanza y hacen el amor. Lo convence de que Roger no es buena compañía para Ilithia, a quien el padre dice que el chico no le conviene ,pues es un irresponsable, bueno para nada, que vive a costas de su padre. La muchacha discute con su progenitor y es reprendida por Diana, a la que calla y le recuerda que no es más que una sombra en la casa y que, aunque sea hermana de su madre, sus responsabilidades son las de una sirvienta. Se marcha y la ofendida tía llora, siendo consolada por su cuñado, al que se aferra para luego besarlo. Nuevamente él le corresponde, pero se arrepiente, pues cree que falta el respeto a Helena. 
 
Queta cuestiona a Santos sobre su vida sentimental y le hace ver que ya es un hombre que pasa de los 30 y debería formar una familia. Él le deja claro que eso no sucederá, pues su vida tomó un rumbo distinto al que sus padres habían planeado para él. La madre le dice entenderlo y lo abraza, asegurando que lo quiere ver feliz sin importar con quién sea que decida encontrar la felicidad. Él le pregunta de las inversiones que le propusieron y la mujer asegura que desistió, mas comienza a presionar a Barbara para que le de su dinero, pues ya ha pasado tiempo. Esta le asegura que dentro de poco se lo dará. 
 
Roger intenta besar a Nubia por la fuerza y le pide que no se haga la mosquita muerta. Ella lo abofetea y le recuerda que es novio de Ilithya, quien aparece y exige que le digan qué está pasando. Nubia sale corriendo y Roger jura a su novia que su amiga es una cualquiera, pues lo provocó, se le insinuó y lo besó, pero se hizo la ofendida en cuanto notó su presencia. Ilithya no puede creerlo y se desahoga con Celeste, quien le dice que muchas veces le advirtió que la otra no era de fiar y solo se hizo su amiga porque es una arribista que quiere formar parte de su grupo. Por su parte Nubia se desahoga llorando y se topa con Gibrán, quien la lleva hasta la pensión, donde la chica le cuenta que dejará el trabajo en el hospital, pues quizás Roger ha confundido todo. El atleta le aconseja que se aleje de ese chico, el cual no es una buena persona, así como de Ilithya, quien siempre lo ha apoyado. De pronto se presenta esta última para abofetear a su amiga, exigiéndole que no se atreva a volverse a insinuar a su novio o de lo contrario lo pasará muy mal. 
Es acompañada por Celeste, quien se burla de la pobre Nubia, a la que critica por ser no solo una muerta de hambre y mosca muerta, sino una cualquiera. La chica es defendida por Gibrán, quien le recuerda a Ilithya que su novio es un prepotente que piensa que puede hacer con los demás lo que quiera y le ha faltado el respeto a Nubia, quien intenta decir a la chica lo que sucedió en realidad, pero esta confía plenamente en Roger, mismo que ríe de placer al contarle a David lo que ha sucedido.
 
 
Leticia se siente más feliz que nunca y lleva el desayuno a Vicente quien serio el pide que no se confunda, ya que que sucedió entre ellos, aunque no fue un error, fue solo un momento de debilidad por parte de ambos. Le deja claro que él le es fiel al recuerdo de su difunta esposa y también le pide que no lo acompañe más a las clases de baile. Ella, furiosa, le deja el desayuno y se marcha a casa, donde llora amargamente, pues lo ama. 
 
Gibrán les cuenta a Aldo y Chavo que ha comenzado a sentir algo por Nubia y de pronto ha dejado de sentir amor por Ilithya, quien le ha demostrado ser frívola e intransigente al igual que Celeste. Los amigos lo apoyen para que inicie una relación con la novata, a la que el chico de nueva cuenta lleva a las albercas para que lo vea entrenar. De ello se da cuenta Santos, el cual se muestra feliz de que su consentido por fin haya encontrado un nuevo motivo para triunfar. Lo hace trabajar para demostrarle de qué está hecho y lo felicita por andar con una chica tan bonita como Nubia, pues se siente feliz por él. Luego le recuerda que la competencia se encuentra cerca, así que lo explota en todo lo que da en la alberca, la cual sufre la ausencia de Roger, el cual está seguro de que no necesita entrenar para ganarle a su rival, pues en el hospital consigue las pastillas que ingiere para rendir en las competencias. 
 
Ángela ha quedado renga y esto la llena de un profundo dolor. Debe someterse a un tratamiento que no pueden pagar y cuando Nubia se entera se lo comenta a Gibrán, quien habla con Ulises y le pide que ayuden a la chica. La visitan y el hombre promete a la sufrida Ángela que hará que recupere el movimiento total de su pierna afectada, por lo que la cita en las albercas, a donde esta acude acompañada de la fiel Nubia. 
 
Vanessa Morante es una atractiva mujer que se reencuentra con Fernando, al que halla atractivo, segura de que a este le han sentado bien los años. Al verse para hacer negocios juntos, ambos recuerdan el ayer y como lo pasaban bien cuando fueron novios, en la adolescencia. Ella le propone que aprovechen sus soledades y se vean más seguido ahora que se han vuelto a encontrar. Pasan una gran velada y terminan en la cama, donde también recuerdan los viejos tiempos. Cuando el hombre vuelve a casa, se encuentra con una Diana furiosa, la cual llena de celos le pregunta en donde y con quién estaba. Él le exige que se calme y no se confunda, pues él ya tiene una esposa. 
 
Ilithya y Celeste planean hacer pasar un mal rato a la inocente Nubia, quien desahoga con Matilde lo difícil que le ha sido encontrar a la persona que busca, aunque sabe que en la Universidad hallará pistas. También le cuenta de la ilusión que le hace estar al lado de Gibrán y aprender a nadar, así como su distanciamiento con Ilithya, quien ahora la ignora y le muestra desdén. La arrendadora aconseja a la muchacha que regrese a su tierra y se olvide de hacer justicia por su propia cuenta, pues quizás sus razones no tienen validez y solo se ha confundido. 
Le recuerda que su madre la busca con desespero y debe esta más que angustiada al no saber de ella. Por ello la chica se comunica con Beatriz, a la que asegura que está bien. La mujer intenta comunicarla con su padre, pero la muchacha no quiere hablar con él y cuelga el teléfono. Llora, confundida, y le escribe a Gibrán para pedirle que se vean. Él la cita en el bar y la presenta con Leticia y Obed, los cuales simpatizan con ella y le cuentan todas las virtudes del muchacho, del que se enamora.
 
 
Andrea se siente mal y acude a visitar a un doctor que decide mandarla con un oncólogo y advierte a Humberto del posible peligro en que su esposa se encuentra. Este ignora los malestares de su esposa, ante la que sigue mostrándose cruel y severo, mas se vale de sus contactos para investigar lo que esta padece, descubriendo que tiene cáncer de páncreas y le queda muy poco tiempo de vida. Habla de esto con Carmen, quien le dice no saber qué padece su patrona, mas saberla muy mal y con mucho dolor. El médico entonces decide internar a su mujer en el hospital y someterla a un tratamiento. Al saber por boca de Carmen del padecimiento de su madre y de que esta quizás pueda morir, el vanidoso Roger sufre y suplica a su padre que haga todo lo posible por salvarla. Dolido, Humberto se desahoga con Fernando, pues ahora comparten un mismo mal: La tragedia de sus esposas. Los escucha Diana, la cual, frívola, recuerda al doctor que este nunca ha mostrado interés por Andrea, así que debe ver su situación como algo positivo, puesto que finalmente se deshará de ella y podrá rehacer su vida con alguien más. Furioso, el hombre se marcha del lugar y Fernando reprende a la cuñada, quien asegura que solo ha dicho la verdad. Desquita su coraje con Helena, a la que suplica que no haga más larga su agonía y termine de morir. 
 
El día de las competencias llega y en los vestidores Roger cuenta a Darío y otros colegas lo sucedido con Nubia, con la intención de provocar a Gibrán. Pero el muchacho recuerda los consejos de Santos y es apoyado por Aldo, quien también compite y le dice que el mejor merecido que le puede dar a su rival es ganarle. Y así lo hace, pues da gran batalla dentro de las albercas, llenando de orgullo al entrenador, quien se desilusiona cuando al final Gibrán se da cuenta de que Aldo sufre un calambre y para socorrerlo se deja ganar. A pesar de haber ganado, Roger se siente desmotivado debido a la enfermedad de su madre y al estar en las bañeras Gibrán lo aborda y le asegura que Nubia no está sola, pues él la defenderá. El villano se ríe de él y asegura que la chica no es más que una mosca muerta que no vale la pena y con quien cualquiera se puede divertir. Agrega que fue ella la que, ambiciosa, se le insinuó, pero Gibrán no le cree y se marcha para buscar a la chica, quien lo abraza para felicitarlo y le asegura que la próxima vez ganará. El atleta sonríe, seguro, y promete a ella y a Santos que así será y que esta vez se dejó vencer para ayudar a un amigo y aliado, pero que la próxima vez bajará del reinado a su rival, el cual descubre a Aldo y Ulises tocándose en los vestidores, por lo que les toma un video que comparte a David, con el que, en complicidad, manda a varios grupos de los alumnos, causando gran revuelo. Pronto el video llega a Ulises y Aldo, el cual decide alejarse del entrenador y ausentarse de la escuela así como alejarse de sus amigos, temeroso al rechazo y el repudio social al que su amante si se enfrenta, pues Santos ha hablado con los directivos de la institución y el rector, Lino Gouvela, ha ordenado que prescinda del masajista, al que no tiene más remedio que despedir, lamentando que no todos puedan ver que el amor no tiene rostro, ni rol ni preferencia. 
 
Gibrán le propone a Nubia que sea su novia y ella acepta, por lo que el chico festeja en el bar y la presenta con su padre, quien sorprende a la chica al decirle que al lado de su hijo no podrá esperar nada, pues está destinado a ser un fracasado. Ella sin embargo confía en su enamorado y sabe que, además de ser un gran atleta, podrá ejercer como todo un profesionista al terminar sus estudios. Más tarde Gibrán reprocha a su papá el no tener fe en él y le pregunta el por qué. Vicente calla y se encierra en su habitación, mientras que el hijo se llena de frustración que desahoga con Leticia, la cual le asegura que saldrá avante en la vida, sin importar la amargura de su progenitor.
 
 
Matilde llena de esperanzas a Ángela, a la que asegura que aun puede encontrar el amor. La muchacha piensa en Ulises, de quien se ha enamorado. 
 
Roger celebra su triunfo en una fiesta en la que Ilithya lo reprende por celebrar cuando su madre se encuentra grave en un hospital. Pelean y él se desahoga con Celeste, a la que se lleva a la cama. Se ríen de Darío y las pretensiones que este tiene con la chica, la cual ha sido amante del novio de su mejor amiga desde hace mucho tiempo. 
 
Diana espera a Fernando y al darse cuenta de que este no llega, le marca al teléfono, sin éxito. Cuando finalmente logra percibir que este no llegará a dormir, lo maldice y jura que si se encuentra con otra mujer lo lamentará, pues él es de ella y de nadie más. Por la mañana lo sorprende al llegar y lo cuestiona. Asombrado, él le exige que guarde su distancia y se de cuenta de cuál es su lugar en su casa antes de que le pida que se marche. Ella lo acusa de haberla engañado al ilusionarla y él le recuerda que fue ella la que se le ofreció, como una ramera. Diana lo abofetea y él la toma con fuerza hasta llevarla frente a un espejo y exigirle que se vea, pues nunca será tan hermosa ni tan pulcra como lo es Helena, la cual en un momento de lucidez ha logrado ponerse de pie y lo ha presenciado todo. Sufre al saber que su hermana es una malvada que desea poseer lo que es suyo y cuando los amantes se dan cuenta de su presencia, les dice que lo sabe todo y se desvanece, muriendo. Su deceso llena de dolor al marido e Ilithya, la cual se alegra cuando Gibrán se presenta a darle sus condolencias y rechaza a Nubia, a la que pide que no sea hipócrita, siendo apoyada por Celeste. 
 
Barbara presiona a Paquita para que invierta los ahorros de su vida y esta le deja claro que no la hará hasta no ver físicamente las ganancias de Queta, a la que visitan junto con Matilde para jugar canasta. Allí la atrevida Barbara les regala galletas que ella misma ha cocinado y le entrega a Queta el cheque prometido, con su inversión triplicada. Las amigas quedan boquiabiertas y celebran en grande, sin embargo, mientras duerme, Queta comienza a sentirse mal y muere. Al siguiente día da un susto a Ulises, el cual no puede creerla muerta. Durante el sepelio, en casa, Barbara se encarga de recuperar el cheque y el pagaré que le firmó, para entonces reunirse con las amigas de la difunta y darles el pésame. Al volver a casa discute con Reinaldo, el cual le dice que se han logrado estabilizar pero desea recuperar su fortuna. La esposa viaja a CDMX y descubre que las oficinas de su socio han sido desmanteladas, dándose así cuenta de que la estafaron. 
 
Romina presiona a Aldo para que le diga si tiene una relación con Ulises. El hermano no desea hablar del tema pero la viralización de su romance llega a manos de Mónica, la cual se sorprende y le pide que hablen. Él acepta su homosexualidad y la madre lo apoya, pero no así José Luis, quien ha vuelto a casa y exige una explicación. Padre e hijo tienen un fuerte enfrentamiento en que el mayor echa de casa al vástago, cuando este le dice estar seguro de que tiene otra familia y que a ello se deben sus viajes. Mónica interviene para defender a su hijo y deja claro al marido que, si alguien debe irse es él, pues finalmente los abandona siempre que tiene motivos poderosos para emigrar. José Luis no puede creer lo que escucha y se refugia en Romina, a la que jura que no tiene otra familia y que viaja por trabajo, únicamente.
 
 
Ángela no se separa de Ulises, a quien ha dado el pésame y a quien asegura estar más que decidida a recuperarse. Él se enfoca en ella y las competencias para olvidar un poco el dolor de la muerte de Queta, la cual le pesa tanto como a las amigas de esta, que no se explican lo que le ha pasado. 
 
Roger tiene un roce con Santos, quien está convencido de que él fue el responsable de viralizar el video por el cual Ulises fue despedido, aun a sabiendas de que este pasaba por un mal momento debido a la muerte de Queta. El muchacho en venganza habla con el rector Lino Gouvela para intrigar contra el entrenador, asegurando que este siempre supo del romance de su ayudante con ciertos estudiantes y lo protegió. 
 
SEPTIEMBRE 2024. El rector habla con el entrenador y le aconseja que tenga mucho cuidado, revelando que ha sido Roger el que los reportó. Esto crea tensión y Santos reprocha al muchacho el no ser solidario e intentar perjudicar a todos. Lo cuestiona sobre la presión que siente y se atreve a preguntarle por qué no es feliz, al grado de insinuar que solo envidia a Gibrán, el cual da todo su apoyo a Aldo, al que aconseja que sea feliz con la persona que ama. El chico habla entonces con Ulises, quien lo rechaza y exige que no lo vuelva a buscar, pues no queire tener problemas con su familia ni en la escuela, a la que el estudiante regresa siendo presa de burlas, principalmente por parte de Roger y Darío, quienes lo atacan por sus preferencias, enfrentándose a Gibrán y Chavo, que defienden a su amigo. 
 
Leticia coquetea con Vicente y este logra sonreír. La mujer le pregunta cuando le pedirá que sea su novia si sabe que se muere por él, que le dice no poder olvidar a su esposa, la cual le dejó una gran carga al dejarlo solo con Gibrán, siendo este un niño. La atrevida vecina le asegura que el muchacho ya se vale por si mismo y pronto se marchará y hará su propia vida, por lo que él debe pensar en su felicidad futura, por lo que le propone unir sus viviendas, sus cuerpos, sus bocas... La mujer, atrevida, lo besa, apasionada y él se deja llevar, mas de pronto se disculpa por no poder corresponderle. 
 
Ilithya habla con Humberto, quien intenta saber qué tan lejos piensa llegar con su hijo. Ella asegura que al terminar la universidad desea casarse y no ejercer como hacen todas las pobres, pues sabe que al lado de Roger tendrá la vida cómoda que siempre ha tenido. El doctor le asegura que eso no sucederá, pues su hijo es irresponsable y no tiene absolutamente nada. 
Da el pésame a Fernando y Diana, la cual siente placer al saber que Helena ya no se interpondrá en sus planes, pero su felicidad dura poco ante la presencia de Vanessa quien, provocativa, da condolencias a Fernando, dejando entre ver la confianza que ambos se tienen y volcando a la cuñada del hombre en un mar de celos.
 
 
Paquita se asombra cuando Matilde le dice que hipotecó la pensión y le dio todo su dinero a Barbara, la cual no le ha podido pagar. La buscan y hablan con Reinaldo, el cual les dice no saber de los negocios de su mujer, a no ser que esta ha hecho que mucha gente haga dinero y se convierta en millonaria de la noche a la mañana. Pronto aparece la estafadora, asegurando a las amigas que todo está muy bien y el cheque de Matilde estará listo muy pronto, pues sus inversiones van viento en popa. Luego discute con Reinaldo, pues este sabe que eso no es cierto y amenaza con denunciarla si no le entrega su dinero. Ella llora y le confiesa que la estafaron y que su contacto en CDMX desmanteló sus oficinas. El enfurecido Reinaldo la sacude y la abofetea para luego desahogarse con Aristía, de quien Barbara comienza a sentir celos, razón por la que la despide. La empleada empaca sus cosas mientras la patrona prepara galletas a las que pone hormiguicida, descubréndola. No dice nada, se despide, pero Reinaldo aparece para impedir que se marche y deja claro a la esposa que si en un mes no le entrega su dinero, la denunciará. 
 
El cumpleaños de Santos es celebrado por los atletas de natación y al no encontrar quien cante, amenizando la fiesta para la que Aldo y Chavo tocarán con su banda, Nubia se ofrece, pero las cosas se complican para la muchacha, pues aunque compra un vestido nuevo para la presentación, Ilithya y Celeste se encargan de acorralarla abordo de un auto, haciéndola caer en un charco de lodo. Ilithya la enfrenta cara a cara y le jura que le demostrará de lo que es capaz cuando la traicionan y se meten con su hombre. Le arrebata su vestido y lo destroza, mientras Celeste ríe. Nubia llora y grita que Roger la acorraló y la besó por la fuerza y ella solo se defendió, pero Ilithya no le cree. La sufrida provinciana se comunica con Gibrán y le dice que no llegará a la fiesta, sin decirle lo que pasó. Él va a buscarla para convencerla. Le asegura que el vestido es lo de menos, pues ella es bonita de cualquier forma,, así que junto con Matilde la convencen y vuelven juntos a la escuela de natación, a la que asiste Ulises, pues Santos ha pedido a Lino que le permita invitarlo y este accede, muy a pesar de las intrigas de Roger y contra la inseguridad de Aldo, quien al ver a su ex amante haciendo presencia, se incomoda. Sin embargo la velada es un éxito y todos disfrutan del festejo a pesar de la presencia de Roger, acechando con la mirada a Nubia, y también la de Ilithya, quien solo busca momentos para molestar a la que cree su más grande enemiga, por la que intercede Gibrán, el cual deja claro a los dos villanos que no permitirá que le hagan daño a su amada, a la cual presenta ante todos como su novia. Al saber esto, el malvado Roger decide que dará un escarmiento a su enemigo, mientras que Ilithya y Celeste acorralan y empujan a la pobre Nubia a una alberca, sin saber que esta no sabe nadar. La chica está a punto de ahogarse y esta vez es Santos quien la rescata sin percatarse de que fueron las otras quienes la empujaron. 
 
Ángela intenta besar a Ulises y él la rechaza. Ella llora ante Nubia, a la que dice haberse enamorado perdidamente del hombre, con quien la protagonista habla, asegurando que la muchacha solo lo ama platónicamente, por lo que le suplica que no desista de ayudarla, pues el amor que esta siente la impulsa para sanar su pierna afectada. 
Ulises accede y durante la terapia, en un arrebato besa a la chica, quien se siente feliz y enamorada.
 
 
Aldo es presa del repudio y las habladurías de la gente, pero cuenta con el apoyo de Gibrán y Chavo, quienes le aseguran que siempre serán amigos y lo apoyan para que siga sus sueños y escuche a su corazón. Los amigos lo llevan a un encuentro con Ulises, quien habla con el chico, el cual le propone que den un ejemplo y sean pareja. El profesor se niega, haciéndolo sufrir, por lo que el chico se desahoga con Romina, quien le hace ver que debe ser feliz a toda costa y sin preocuparse por los problemas de sus padres, situación por la que el enamorado muchacho conoce a Xavi Durán, quien lo enamora y le propone que abran un blog, donde relaten su amor con palabras, imágenes y videos, lo que los amigos del chico apoyan. 
 
Vanessa no se separa de Fernando y entera a Humberto que su reencuentro con el hombre la hizo renacer muchos sentimientos que creyó haber perdido, por lo que está dispuesta a darse una nueva oportunidad, a pesar de estar infelizmente casada con Eduardo Rivalpando, un hombre depresivo a raíz de su disfunción eréctil, que con los años perdió la ilusión por vivir y el sentido de la diversión, y que vive atormentado por no haber concebido un hijo. Aunque se entera de esto, Humberto le advierte a Vanessa que tiene dos grandes rivales: Ilithya, la hija de Fernando, y Diana, la cuñada, la cual cuida de él como un perro guardián y quizás hasta esté enamorada de él, en silencio. Y no se equivoca, pues Diana no se separa del hombre un solo momento, al grado de sentirlo asfixiarse, al grado de metérsele en la cama. Él le propone que, ahora que Helena ha muerto y ella nada tiene que hacer con él, busque un lugar donde vivir. La amargada mujer llora en soledad y jura que no se marchará, así como promete que si el cuñado no le corresponde y la rechaza, lo hará pagar muy caro. 
 
Barbara entrega a Matilde el cheque prometido, haciéndola muy feliz por el dinero que ha ganado. Le regala galletas que le induce a comer mientras toman café y cuando la dueña de la pensión se siente mal, finge haberle llamado a un doctor, acompañándola hasta su cama, donde la ve morir para entonces arrebatarle el cheque y el pagaré que le firmó. Se va sin dejar rastro de su presencia. La muerte de Matilde sorprende a Ángela, quien sufre al encontrarla muerta y en el funeral se atreve a culpar a Barbara de la muerte de su abuela y sus amigas, gritando que las dos murieron justo el día después de haber recibido el cheque que les prometió por haber invertido. Al enterarse de esto, Ulises investiga y descubre que su madre lo perdió todo, por lo que antepone una denuncia y se comienza una investigación a la que se suma Misael, otro sobrino de Matilde, el cual ha llegado de lejos para descubrir que su tía murió en la ruina y que la pensión se encuentra hipotecada. Al saber esto, alarmada, Barbara decide huir a la capital del país y cuando busca a Reinaldo para pedirle ayuda, lo descubre encamándose con la ardiente Aristía, contra la que se abalanza para desgreñarla, lo mismo que al marido, quien le deja claro que ya no la quiere y le entrega la demanda de divorcio, asegurando que, si no la firma, la entregará a las autoridades, pues sabe lo que ha hecho. Ella asegura ser inocente y se aterra cuando Aristía le dice saber cómo mató a las ancianas a las que estafó. 
 
Ilithya busca a Roger en el hospital, donde escucha a algunas empleadas decir que el muchacho siempre se divierte acostándose con algunas de las enfermeras y que en ese momento se encuentra con una en los lockers de los empleados. Ilithya acude al lugar y ordena a una empleada que abra la puerta. Cual es su sorpresa al ver a su amado revolcándose nada más y nada menos que con su mejor amiga ¡Celeste!, quien jura que todo tiene una explicación. La herida Ilithya los desprecia a los dos y les exige que no se le vuelvan a acercar.
 
 
Nubia se acerca a Romina, con la que hace gran amistad, pues ambas comparten cosas y sueños en común. Cuando Nubia le cuenta que su don de canto proviene de familia, la otra le asegura que ella y Aldo también son músicos. La invita a casa, donde Mónica le da buena acogida, lo mismo que Aldo, el cual les cuenta que su relación con Xavi está muy bien y que no les importan ni la diferencia de edades ni las críticas de la gente. Nubia, en un momento oportuno, mira alrededor de la casa y ve fotos de la familia, asegurando a Mónica que su hogar es acogedor y cálido, prometiendo regresar para convivir con todos. Luego se reúne con Gibrán, el cual entrena sin concentración por lo que Santos le pide que piense muy bien lo que quiere, pues quizás la natación no es lo suyo y solo se ha aferrado a ella por consentir a su padre. Le dice que habrá un gran premio en el campeonato anual y a él le vendría bien ganar ese dinero. El atleta promete que hará lo posible y le cuenta la situación por la que atraviesa al tener que ayudar con los gastos de la casa, la universidad y encima desvelarse para poder conseguir el dinero. Debido a esto Santos acude a hablar con Lino y le pide apoyo de una beca del 100% para el alumno, el cual se lo merece, pero para el rector no es suficiente, pues el atleta no le ha entregado victorias a la institución, por lo que considera que Gibrán se debe decidir entre el trabajo y las albercas, pues no se puede tener todo en la vida. Es por ello que el entrenador acude a Vicente y le hace ver el daño que está causando a su hijo, el cual puede tener un futuro prometedor. Los ha escuchado Leticia, quien hace ver al vecino que ha fallado como padre y aun está a tiempo de hacer lo que un papá debe hacer por sus hijos. 
 
Misael no desea compartir la pensión con Ángela, a la que entera que él lo merece todo ya que ella siempre vivió de arrimada con la abuela. Discuten y la chica se desahoga con Ulises, quien está más que dispuesto a ayudarla. Los ha visto Aldo, quien cuenta a la chica que una vez estuvo enamorado del entrenador. Esto despierta sospechas en ella. 
 
Lino cita a Gibrán y le exige que se dedique a dar triunfos a la universidad si es que quiere una beca del 100% durante los últimos semestres que cursa. El chico explica que puede rendir, mas pide tiempo, ya que no puede dejar el trabajo. No sospecha que todo se trata de una intriga en la que han influido Roger y Humberto, el cual ha prometido a Lino que no contribuirá con más donativos a la institución si permite que a su hijo se le arrebate el próximo campeonato. Es por ello que el rector ha decidido poner trabas a Gibrán, quien tiene un conflicto por unas colegiaturas atrasadas y por ello se le prohíbe el acceso a las albercas y a la universidad. El muchacho sin embargo jura a Chavo y Aldo que ganará el campeonato y él mismo abrirá su propia escuela con el dinero que gane. Se lo hace saber a Vicente, quien le reprocha el no tener trabajo y estar llenos de gastos. Gibrán esta vez reacciona y exige al hombre que él también haga algo en vez de gastarse el dinero que le da emborrachándose con el pretexto de que no supera la muerte de su esposa. 
El nadador asegura que él perdió a su madre, se quedó solo con un padre que lo rechaza y además se ha hecho cargo de mantener la casa, pues el otro lo perdió todo y se resignó a vivir a costa suya, que ha logrado salir adelante con esfuerzo y esta vez no se detendrá: ¡Conseguirá alcanzar sus sueños! ¡Aunque esto implique retar al destino! Y es apoyado tanto por Santos como Ulises, quienes deciden entrenarlo durante las noches, cuando todos se han retirado de la Universidad, esto con apoyo de Leticia, la cual asegura al protagonista que seguirá recibiendo su mismo salario, pues ella sabe lo importante que es para él ganar la próxima competencia y el campeonato. Por otra parte Ulises hace mancuerna con Ángela, pues no desiste de hacer justicia y ambos buscan a Barbara para encararla. Ella les asegura que entregó a Queta y Matilde un cheque por sus inversiones y Paquita es testigo. Esta les asegura que presenció cuando Queta recibió sus remuneraciones, pero nada le consta sobre Matilde, insistiendo en que se le hace muy extraño que ambas hayan muerto justo al día siguiente de tener en sus manos el famoso cheque prometido por la estafadora, la cual se siente perdida y no tiene más remedio que acceder a firmar el divorcio y dar a Reinaldo su libertad para que sea feliz con Aristía a, a la que intenta hacer probar un pastel que hizo, mas esta teme por su vida y no prueba un solo bocado. Luego de esto habla con Ulises y Ángela, a los que asegura que su patrona se encuentra detrás de las muertes por las que ellos quieren hacer justicia. Luego él tiene un enfrentamiento con Misael, el cual intenta echar a Ángela de la pensión.
 
 
Andrea desahoga con la fiel Carmen el dolor que siente por la indiferencia de su hijo, más que el de su padecimiento. La salud de la mujer empeora y el médico hace saber a su familia que solo es cuestión de horas para que la enferma muera. Esto hace sentir muchos remordimientos a Humberto, quien reconoce ante Carmen que hizo a un lado a su mujer para salir adelante y llegar alto, como siempre ambicionó desde que se hizo amigo de Fernando, en la universidad, cuando entró becado y conoció lo que era el mundo de los ricos y se prometió a sí mismo que pertenecería a él. Luego exige a Roger que pase tiempo al lado de su madre, pero este se resiste, pues no sabe qué decirle a esta, mas sufre en silencio al saber que la perderá y se refugia en la frívola Ilithya, quien le hace ver que por la misma tristeza que comparten, deben estar juntos para siempre. 
 
Diana pide a Fernando que la deje trabajar en sus empresas pues desea sentirse útil. Él solo se burla de ella, argumentando que no sirve para nada más que encargarse de supervisar la casa. Ella le reprocha que la vea como una sirvienta y él asegura que eso es. La mujer llora y el duro cuñado le pide que no haga escenas. Ella acude a Ilithya, quien al escucharla descubre que está enamorada de su padre y le exige que se deshaga de ese sentimiento pues esa relación no pude ser. Desde este momento la muchacha comienza a rechazar a Diana y pide a su padre que encuentre la manera de enviarla lejos. No sospechan que esta tiene un enfrentamiento con Vanessa, a la que busca para exigirle que se aleje de Fernando. La discusión entre las mujeres llega a oídos del depresivo Eduardo, el cual le reprocha a su mujer el haberse reencontrado con su viejo amor de juventud. Los esposos discuten y ante la presión de él, ella acepta que hace mucho tiempo lo dejó de amar y se mantiene a su lado por compromiso y para no dañarlo más de lo que está. Lo deja solo y él promete que muy pronto se librará de él. 
 
Xavi es presa de la violencia de José Luis, el cual a puño cerrado le exige que se aleje de su hijo. Aldo lo busca, pero el novio lo trata con indiferencia y revela a Chavo que no puede seguir con él, ya que nunca podrán llegar a tener nada serio, mientras los suyos se opongan a esta relación. Acuden al bar de Leticia, donde lo alientan para que luche por el novio, quien a su vez enfrenta a su padre, quien lo abofetea y le dice no estar dispuesto a tener un hijo maricón. Lo vuelve a correr de su casa y el chico se hospeda con Chavo, mientras que sus progenitores discuten, pues Mónica defiende a su hijo y reprocha al marido ser un padre ausente. Al escucharlos, Romina sufre y llora y busca desahogarse con Nubia, a la que cuenta lo que está sucediendo. Luego la muchacha y Aldo hablan con la protagonista sobre lo difícil que ha sido su vida desde que son niños. Cuando el joven dice no entender por qué su madre jamás ha dejado a José Luis, Nubia los entera de que en su casa ha experimentado su misma situación y por ello se fue. Promete que los ayudará y esta vez se comunica con Teresa, su madre, a la que dice donde está y le deja claro que no volverá a casa mientras la mujer no se separe del marido.
 
 
Celeste busca a Ilithya para que hablen y esta no hace más que cachetearla y decirle que es igual o peor que la muerta de hambre de Nubia, misma la cual, gracias a un contacto de Misael, comienza a trabajar cantando en un café, donde es sorprendida por Roger, quien la molesta intentando seducirla. Ante el rechazo de la chica, le promete que se las pagará, pues nadie se resiste a él. Nubia dice a Misael temer a que este tome represalias y el hombre le aconseja que se vaya lejos, sin embargo la chica piensa en Gibrán y cree que es el hombre de su vida. El otro se ríe de ella y le recuerda que su familia la está buscando, lamentando que el protagonista sea hijo de un borracho bueno para nada que seguirá el mismo camino. Se sorprenden cuando Roger busca a Nubia en la pensión, armando alboroto. Misael lo pone en su lugar y le exige que deje en paz a la chica. El pesado chico solo se burla del fuereño y la acusa de ser un corriente y muerto de hambre por lo que le truena los dedos y le ordena que vuelva a llamar a Nubia, quien aparece con una cubeta de agua que arroja sobre el insolente muchacho, argumentando esperar que así se le baje la calentura. Le cierra la puerta en la cara y junto con Misael ríe por la situación, mientras que el furioso Roger jura que se las pagarán. Acude a buscar a Celeste, quien se niega a estar juntos en la intimidad, luego de ser descubiertos mas él sabe como convencerla de entregarse a él. 
 
Gibrán se sorprende cuando descubre a Vicente vestido como burócrata. El progenitor lo entera de que ahora en adelante las cosas cambiarán, pues ha decidido encontrar un trabajo. Sin embargo sus esperanzas se desmoronan al darse cuenta de que, por la edad, ya no hay oportunidades laborales para él, que se desahoga con Leticia y Obed, el cual le propone que trabaje en el bar y con ello de tiempo a su hijo para descansar y rendir en los entrenamientos de natación. El hombre intenta negarse, pero la mujer lo convence y dan la noticia al muchacho, quien de inmediato comienza a mostrar mejor desempeño, llenando de orgullo a Santos, el cual paga las colegiaturas que el chico adeuda para que pueda reincorporarse a la Universidad y continuar con sus estudios. 
 
Diana le dice a Ilithya que ha descubierto que su padre tiene amoríos con otra. La chica enfrenta al progenitor, el cual le hace saber que él es un adulto y tomará sus propias decisiones. 
La chica sin embargo se opone a que él pueda relacionarse con otra y es apoyada por su tía, a la que el hombre culpa de la situación y le advierte que no permitirá que intrigue para poner a su hija en su contra, tal y como la puso en contra de Helena. Por eso no se tienta el corazón para echarla a la calle, asegurando que solo podrá encontrar trabajo como criada o como ramera, que son las dos únicas cosas que sabe ser. La mujer le pide de rodillas que no le haga eso, pues no tiene a nadie. Él se apiada de ella y permite que se quede y la mujer luego acude a Humberto y le revela estar desesperada, pues ama a su cuñado. El hombre le aconseja que se olvide de él y se busque su propia vida, pero la mujer está sola en el mundo y solo tiene a su sobrina, quien ahora también la rechaza por sus sospechas.
 
 
OCTUBRE 2024. Ángela tiene dificultades con Misael, al que descubre registrando cada rincón de la pensión en busca del supuesto dinero que Matilde recibió por parte de Barbara. La nieta le asegura que eso se trató de una estafa y que su abuela fue asesinada. Él se resiste a creerlo, la ofende gravemente y ella lo abofetea. Cuando él está apunto de responder de la misma manera, aparece Ulises para frenarlo y exigirle que se marche. Ante su negativa, se vale de Santos para comenzar a investigarlo. Se sorprende cuando Ángela le pregunta su alguna vez ha tenido interés en los hombres. Él lo niega y busca a Aldo, a quien le asegura ser bisexual mas estar interesado más en las mujeres. El otro intenta besarlo y son vistos por Xavi, a quien el novio intenta explicar que solo quiso probarle algo al otro. 
 
Nubia es acosada por Roger, el cual desea hacerla suya. Ella lo abofetea y este responde violentamente. Cuando está a punto de golpearla, aparece Gibrán para enfrentarlo y defender a su amada. También hace presencia Darío, para secundar a su cruel amigo, sujetando a Gibrán para que este lo golpeé. Sin embargo el atleta es mucho más fuerte y se defiende de ambos, dejando claro a su enemigo que lo vencerá y le demostrará de qué está hecho. Luego consuela a Nubia, a la que cuenta su sueño y deseo de que ella trabaje con él, haciendo lo que sea. Se alarma cuando la chica le dice estar considerando dejar la capital, pues las cosas no han resultado como ella pensaba que serían y sus planes de hacer justicia se desvanecen poco a poco, ya que no desea dañar a terceros. Los enamorados entonces intensifican su amor entregándose el uno al otro. Pasan grandes momentos juntos y él le pide que no se marche y deje el café para cantar en el bar de Leticia, quien la acepta, encantada, por lo que la muchacha comienza su entrenamiento bajo supervisión de la mujer, quien escucha su historia y le aconseja que haga lo que debe hacer, pues quizás al hacer justicia lastimará a terceros, pero también los liberará y alentará a hacer su propia justicia. La chica entonces habla con Aldo y le muestra una fotografía de ella y sus padres, asombrándolo, pues él descubre que Nubia en realidad es su media hermana y ella le hace saber que los viajes que José Luis hace son para pasar tiempo con sus dos familias, teniendo engañadas a sus dos mujeres. El muchacho no puede evitar llorar de rabia y maldice a su padre, al que está decidido a enfrentar, mas la media hermana le pide que aguarde, pues el momento de poner al hombre contra la espada y la pared se acerca, así como el cumpleaños del progenitor, mismo que se comunica con Teresa para decirle que tiene trabajo en la capital y no regresará hasta dentro de unos meses. Esta se comunica con su hija, la cual le pide que viaje a la capital y pase unos días con ella. 
 
Ilithya se entera del pleito entre Roger y Gibrán y busca a su ex para preguntarle qué pasó. Este le vuelve a contar mentiras mientras ella lo cura. Le suplica que regrese con él pero la novia se niega rotundamente, aunque cree que la culpable de todo es Celeste. Le aconseja que se preocupe más por entrenar que por molestar a Gibrán, el cual estuvo a punto de ganarle en la última competencia. El villano sin embargo cree que con el dinero de su padre puede comprar a los jueces del campeonato y jura que usará ese momento para aplastar a su rival, al que odia desde que eran niños, por sobresalir más que él.
 
 
Misael muestra cierto interés en Ulises, con el que bebe unos tragos para luego armarse de valor y besarlo. El otro se deja llevar por un instante mas reacciona y lo rechaza. Acude al lado de Gibrán, el cual entrena arduamente, dispuesto a ganar el campeonato y recibir el premio, con el único objetivo de vencer a su más grande enemigo y rival: Roger, quien por su parte a pesar de las advertencias de Darío, descuida su entrenamiento físico y se lo pasa bebiendo y drogándose en antros con los que se divierte, así como enamorando chicas en el hospital, donde la joven pasante de enfermería, Yareni lo entera de que espera un hijo suyo. ël la rechaza, además de burlarse de ella y sobajarla verbalmente. Le exige que se deshaga del bastardo que lleva en su vientre y la chica sufre por su rechazo. 
 
Roger tiende una trampa a Gibrán para hacerlo pasar como ladrón, apoyado por Lino, quien responsabiliza al chico, a quien Chavo defiende. Los dos jóvenes rivales se hacen de palabras, uno atacando y otro defendiendo al acusado hasta que Santos, harto de la situación les hace saber que dará parte a la policía, a la que el rector da una fuerte suma de dinero para que sea Gibrán el culpable. Este grita su inocencia y Santos busca al rector para reprocharle el sospechar de él solo por su amistad con Humberto, amenazando con exponerlo . El rector se retracta entonces y dice no sospechar de nadie, pues todos son buenos chicos. Luego discute con Roger, al que dice que no pondrá en peligro su reputación solo por sus caprichos y le jura que ya no lo apoyará ni recibirá más dinero de su padre, pues no desea ser injusto con Gibrán. El muchacho enfurece y justo en ese momento recibe una llamada de su padre, quien le dice que Andrea ha muerto. El deceso hace que el chico se de cuenta del poco aprecio que tiene por parte de sus compañeros y la gente en general, pues solo David y Celeste acuden a acompañarlo en el último adiós a su madre, donde Ilithya no se separa un solo momento de él. 
 
Diana le jura a Eduardo que Vanessa es amante de Fernando y que entró a la vida de este desde que Helena vivía. El despechado hombre discute con su esposa, quien harta de la situación finalmente acepta que no lo ama, que tiene una relación con el millonario y que está cansada de él y de que nunca hayan podido tener intimidad, desde que se casaron. Él le promete que la dejará libre para que sea feliz y mientras la cónyuge checa unos documentos en su oficina, escucha un disparo. Se aterra al descubrir que su marido se ha suicidado y de inmediato busca refugio en Fernando, el cual acude a su lado. 
 
Misael le dice a Ángela saber que Ulises no es sincero con ella y le oculta un secreto que la desilusionará. Ella se desahoga con Nubia, quien le pide que no haga caso de las provocaciones de su primo y habla de esto con Gibrán, quien cuestiona al afectado, mismo que promete a Ángela que no tiene nada qué esconder. 
 
Ulises busca a Misael para darle tremenda golpiza y exigirle que se marche para siempre. Este se ríe de él, pues lo sabe bisexual y temeroso a que todos se enteren.
 
 
A las albercas comienza a asistir Emilio, un alumno de nuevo ingreso que de inmediato muestra la afinidad que tiene con Aldo, con el que termina besándose en las bañeras. Los muchachos comienzan a salir y tener encuentros, de lo cual se da cuenta Ulises, quien acepta ante Lino que el muchacho merece vivir conforme a su edad. El entrenador aboga por él ante el rector, quien sabe que el masajista le hace falta, pues las cosas no son iguales en la escuela sin él, ya que hasta Santos ha cambiado, por lo que lo cita le ofrece que vuelva y su regreso llena de felicidad a todos, sobre todo al entrenador. Cuando Aldo se entera, intenta dejar la natación, pero Ulises lo convence de no hacerlo. Se dan un abrazo y el chico se desahoga con Emilio, con quien engaña a Xavi, pues pasa con el nuevo nadador la mayor parte del tiempo, despertando los celos del otro. 
 
Barbara se ha instalado en CDMX mientras que Reinaldo vive su idilio con Aristía, la cual se sorprende cuando la policía aparece en la casa para arrestar a la estafadora. El marido les aclara que él también fue víctima de la esposa, de la cual se ha divorciado. Les dice que esta ha emigrado a la capital del país y de inmediato se ordena su búsqueda, pues, a pesar de que Misael se interpone, Ulises y Ángela han permitido la exhumación de Queta y Matilde y se ha comprobado que estas murieron envenenadas, dando Aristía testimonio de que ella alguna vez vio el veneno de las hormigas en la mesa en que su patrona preparaba galletas que llevaba a las amigas, que son lloradas inconsolablemente por Paquita, a la que Chavo consuela en todo momento. 
 
Gibrán conoce a Teresa, a la que junto con Nubia lleva a dar un paseo por la ciudad, así como al bar de Leticia, donde la provinciana mujer se siente fuera de lugar, razón por la que pide a la hija que vuelvan a casa. Esta le asegura que lo harán, luego de que le de una sorpresa, pues sabe que Mónica y Romina preparan una reunión de cumpleaños para el severo José Luis, al que tanto Nubia como Aldo desean darle una gran sorpresa. 
 
Fernando entera a Ilithya de su relación con Vanessa y que, aunque no piensa casarse nuevamente, sí piensa rehacer su vida con ella, que ha enviudado y se siente responsable de la decisión que Eduardo tomó. La hija del hombre amenaza con irse a vivir con Roger si él se relaciona con una nueva mujer. Él le da la libertad de hacer lo que quiera y entonces Diana aprovecha esto para pedirle a su sobrina que se unan y eliminen a Vanessa, quien se ha presentado a cenar casa, dándose cuenta de que no es bienvenida por las mujeres. Sin embargo no le importa y deja claro a Ilithya que ella solo es una amiga de su padre y piensa ser su compañera, no su esposa. A pesar de esto la muchacha se muestra renuente y busca a Roger en el hospital, donde se entera de que este ha embarazado a una muchacha. Indaga de quien se trata y acude a Yareni, quien le cuenta como el otro le ofreció amor, matrimonio, pero solo la engañó como ha engañado a muchas otras. La novia del muchacho lo busca para abofetearlo y reprocharle todos sus engaños. Él entonces le dice estar harto de ella, a la que hizo su novia solo por hacer daño a Gibrán, mas ahora estar interesado en Nubia. 
Ilithya se da cuenta de que también fue usada pro el chico, del que se burla pues al estar interesado en Nubia solo demuestra que en realidad quiere todo lo que su rival posee, mas nunca será igual a él, que a pesar de no tener dinero lo supera en todo.
 
 
Darío pide a Celeste una oportunidad y ella lo rechaza. Él entonces le hace ver que cuando Roger se aburra de ella la desprestigiará y nadie la tomará en serio, pues es lo que este siempre hace con las mujeres puesto que es un patán. Le cuenta del embarazo de Yareni y de cómo el chico se relaciona con muchas mujeres en el hospital. Celeste sin embargo lo ama y no le importa ser plato de segunda mesa. 
 
La competencia nacional de natación se acerca y Santos le pide a Gibrán que se concentre en ganar, pues no solo necesita el premio en efectivo, sino también demostrar a todos que es el mejor. Es así que se presenta a competir y de nueva cuenta es presa de las burlas e insultos de Roger, quien se vale de medicamentos para aumentar su rendimiento. Toman sus lugares y al escuchar un disparo los competidores saltan al agua. La competencia está reñida y al percibir que Gibrán le lleva ventaja el desdichado Roger aumenta la velocidad. Ambos pasan a las semifinales y, por su esfuerzo, también a la final, donde se elegirán a los tres mejores y se entregará el premio en efectivo. Roger jura a su rival que le ganará y gozará al ver que sus bolsillos se inflan más y él sigue siendo un muerto de hambre. No cuenta con que Ulises ha encontrado entre sus cosas las pastillas que consume y pone al tanto de esto a Santos, quien considera prudente aguardar a la final para desenmascarar al villano. 
 
Gracias a la presión que Ulises y Ángela ejercen, Barbara es detenida y juzgada ante las autoridades, pues se ha dedicado a hacer enriquecer a mucha gente. Aun así las pruebas y los testimonios de Reinaldo y Aristía la hunden y es condenada a pasar sesenta años en la cárcel, donde llora por sus errores y maldice su suerte. 
 
José Luis se llena de felicidad cuando Mónica y Romina los sorprenden con un pastel de cumpleaños que ellas mismas han preparado. La esposa lo entera de que ha dado aviso a Aldo, el cual se presenta en casa y festeja a su progenitor, del que no quita la mirada de encima, intimidándolo. Este le pregunta qué le sucede y de pronto suena el timbre. El hijo entera a todos de que tiene una sorpresa para su papá. Acude a abrir la puerta y da la bienvenida a Teresa y Nubia, quien con un regalo en mano felicita a su papá. La situación estremece no solo al hombre, sino también a sus mujeres, las cuales no se quitan la mirada de encima, una de otra. Aldo asegura a su padre que ahora sí puede festejar con sus dos familias unidas. Teresa sale de inmediato, pero no Nubia, quien enfrenta a José Luis y le reprocha su ausencia desde que era una niña, revelando que ahora comprende por qué solo pasaba unos meses en casa y luego se ausentaba por otros. Él le pide que se marche, pues la buscará después para arreglar las cosas. Ella dice no querer volver a verlo y se va. El hombre toma con los puños a Gibrán, lo maldice por lo que ha hecho y esta vez Mónica defiende a su hijo y enfrenta al marido, al que abofetea. No está dispuesta a perdonar su engaño, así que le pide que se vaya de su casa y no vuelva más. Él busca refugio en Romina, quien también lo rechaza. Por su parte Nubia tiene un enfrentamiento con Teresa, quien le dice que ella siempre supo que José Luis tenía otra mujer, mas el amor que siente por él es más fuerte que todo. 
Las dos enfrentan a este, el cual jura a su hija que jamás quiso hacerle daño. Ella lo rechaza y al ver que Teresa se muestra comprensiva con el hombre, los aborrece ambos y les aconseja que vuelvan a la provincia, donde no puedan hacer más daño. Busca a Gibrán para contarle la verdad y desahogarse y luego de dejarla en la pensión busca a Aldo, para brindarle su apoyo junto con Chavo, el cual no se separa un solo momento de Romina, mientras que la sufrida Mónica se desahoga con Paquita, quien le aconseja que perdone al marido por el bien de sus hijos, los cuales necesitan de un padre, pero la engañada mujer cree que no sería justo y por ello, apoyada por Aldo y Romina, interpone la demanda de divorcio.
 
 
Leticia pide a Vicente que acompañe a Gibrán en las competencias, puesto que su apoyo es importante para el muchacho, con el que se debe reconciliar. El hombre decide hacerlo, acompañado por su vieja amiga y Obed, quien al conocer a Ulises queda impresionado y lo invita al bar, donde hablan y el primero cree que son el uno para el otro. Apoyan a Gibrán en la segunda prueba, misma por la cual también pasa a la final y vuelve a padecer las agresiones de Roger, el cual lo amenaza de muerte con un arma de fuego y le jura que no se tentaría el corazón para matarlo, pues lo odia. Gibrán lo acusa de ser el asesino de la muerte de su madre y entonces aparece Vicente para decirle que eso no es verdad y que fue una mentira que el mismo hombre se inventó en su negativa para aceptar que su mujer falleció a causa de su embarazo de alto riesgo. 
 
Misael ha llegado a un arreglo con el banco y recupera la pensión de Matilde, la cual desea vender. Ángela se entera y lo enfrenta, pero este ya se ha decidido y la corre junto con Nubia, quien ha aparecido para defenderla. La nieta de la occisa se niega a marcharse y entonces él, para darle un susto, decide incendiar el lugar, pues la odia por ser la única heredera de la mujer en el testamento que él ha encontrado y ha jurado sacar provecho de la muerte de la anciana y quedarse con una buena tajada. El incendio no llega a más pues de inmediato llegan los bomberos. Ella está convencida de que fue provocado por su primo y se lo dice a Ulises, a quien Santos informa que Misael acaba de salir de la cárcel, donde pasó años por ser sospechoso de haber matado a un amante. 
 
Emilio y Xavi tienen un enfrentamiento por el amor de Aldo, a quien el aun novio reprocha el estarlo engañarlo con su nuevo compañero. Xavi considera que debe vivir conforme a su edad y con quien comparta las mismas pasiones, así que decide terminar con Xavi, al que suplica que no lo vuelva a buscar. Este se ríe de él pues lo sabe todavía enamorado de Ulises. Esto lo escucha Ángela, quien se sorprende al enterarse. 
 
Diana busca a Vanessa, quien dice estar segura de que la cuñada ama a Fernando y no desea que se interponga en su camino. Se burla de la insignificante solterona, a la que aconseja que busque en otros mares su pez gordo pues está naufragando. La hace mirarse en un espejo. Esta llora y, cuando la rabia se apodera de ella, jura que nada ni nadie le arrebatará lo que es suyo y por tantos años ha esperado. Empuja fuertemente a Vanessa, haciendo que esta caiga al vacío, por el balcón, estampándose sobre la mesa de unos clientes de cafetería que se aterran al verla, empapados de su sangre. La orgullosa Diana disfruta de lo que ha hecho, hasta las lágrimas. 
Sale de inmediato sin que nadie note su presencia, pero sin contar con que las cámaras de seguridad la han grabado. Fernando se entera de lo sucedido y se pregunta cómo pudo suceder el accidente. Revisan las cámaras del hotel y descubre que Diana visitó a la mujer momentos antes de morir. De inmediato la busca en casa para enfrentarla. Esta jura ser inocente de la muerte de la amante de su cuñado, quien no le cree. Pronto llega la policía a detenerla y la situación horroriza a Ilithya, quien se siente sola y derrotada.
 
 
Mónica pide a Aldo que vuelva a casa y junto con Romina los tres rechazan a José Luis, al que la mujer pide que, si Teresa lo perdona, permanezca a su lado. El hombre jura estar decidido a dejar a esa mujer y a Nubia, con tal de estar con ellos. La familia no puede entender como es tan vil y poco hombre para proponer tal cosa. Él no se da cuenta de que Teresa ha ido a hablar con Mónica y lo ha escuchado todo, por lo que se despide de él para siempre. Suplica a su hija que vuelvan a Veracruz, pero la chica ha decidido convivir con sus hermanos y hacer una vida en la ciudad, por lo que la deja en la central de autobuses y se despide de ella, que se marcha con un nudo en la garganta por el dolor de saber quién es su amado José Luis en realidad. 
 
DÍAS DESPUÉS: Gibrán se presenta a la prueba final de natación y Roger se burla de él, asegurando que de nueva cuenta le ganará. No sospecha que Santos le tiene preparada una sorpresa. Y en efecto, Roger logra ganar y cuando está por recibir la medalla los jueces reciben la noticia de que el ganador se hizo de su puesto con mentiras. Es llevado a enfermería, donde se comprueba que no solo se inyectó sustancias que aceleran su rendimiento sino que es consumidor de drogas que causan adicción por lo que es eliminado y no se le permite volver a concursar, haciendo esto de Gibrán vuelva a competir a las albercas, pues se realiza de nueva cuenta la prueba, de la que él resulta ganador. Recibe su medalla, llenando de orgullo a Vicente, quien le pide perdón por haber sido un mal padre. Los dos se dan un fuerte abrazo que conmueve hasta las lágrimas a Nubia, Santos y Leticia, quien besa a Vicente delante de todos y le pide que sea su novio. Él acepta y la escena inspira a Obed, que en un arrebato besa a Ulises, lo cual, ante los aplausos de la gente, inspira a Aldo, que besa a Emilio y así sucesivamente, hasta que la mayoría de los presentes terminan dándose besos, en una gran celebración que se ensombrece cuando de pronto desaparece Nubia, a quien el vengativo Roger se ha llevado e intenta hacer suya por la fuerza, dentro de los baños. Ella grita, lo araña, sin poder ser escuchada. Pero pronto alguien se da cuenta y da el pitazo por lo que aparece Gibrán para defenderla, enfrentándose a los golpes contra su rival, quien esta vez extrae una navaja, dispuesto a matarlo. Pero Chavo, al intentar hacer daño a su enemigo, sufre un terrible calambre, resbala y se golpea la sien contra un filoso lavabo que lo ofusca gravemente, al grado que convulsiona. Es llevado al hospital, donde Humberto ruega por su vida y descubre a Yareni llorando. Ella le dice estar embarazada de su hijo, el cual muere llenando de dolor al progenitor, quien se culpa por no haber conducido a su hijo por buen camino. Tal fatalidad provoca que Celeste pida a Ilithya que la perdone. Las dos amigas se abrazan fuertemente y sufren por la pérdida, lo mismo que Yareni, a quien Humberto ofrece dinero para que desaparezca, pero al hablar con Carmen esta le hace ver que con un nieto él puede tener la oportunidad de redimirse y hacer de él el hombre de bien que no supo hacer con Roger. 
 
Gibrán y los suyos celebran su triunfo en el bar de Leticia, donde Lino se presenta para felicitarlo y hacerle saber que a partir de ahora y hasta que culmine sus estudios, tendrá una beca del 100% mientras que el muchacho, con el premio ganado, entera a todos que abrirá su propia escuela de natación y pide a Santos que lo apoye. Este acepta, lo mismo que Ulises, por lo que la celebración se hace todavía mayor y en ella Vicente jura a su hijo que a partir de ahora las cosas serán diferentes y pide a Nubia que le de una nueva oportunidad de presentarse, pues no es el hombre que conoció meses antes. Todos se sorprenden cuando Leticia saca a bailar al hombre y lo besa delante de todos, asegurando estar enamorada. Pronto aparecen Chavo y Romina, así como Aldo y Emilio, para festejar no solo por el triunfo de su amigo, sino para celebrar el amor.
 
 
Ulises deja claro a Obed que no quiere nada con él, por lo que le ofrece su amistad y le cuenta del amor que siente por una muchacha. También descubre la existencia del testamento de Matilde y entera a Ángela de su contenido. Ella enfrenta a Misael junto con la policía, poniendo una orden de restricción que prohíbe al hombre acercarse a ella y a la pensión. El rumor de que el hombre es un asesino se esparce y entonces él decide irse para siempre, no sin antes decirle a su sobrina que su amado Ulises la engaña, pues también le gustan los hombres. Ella habla con su gran amor, quien le asegura que solo ha sentido cierta atracción hacia los de su mismo sexo, pero no tanta como para comprometerse o amar, como desea hacerlo con ella, a la que pide que se convierta en su esposa. Feliz, la muchacha acepta. Al saber esto, Obed sufre, pero se resigna. 
 
TIEMPO DESPUÉS: Gibrán gana nuevas competencias y se posiciona para competir en los juegos olímpicos, donde también obtiene una medalla de oro, la cual dedica a su amada Nubia, quien a su vez se gradúa con su amado y el resto de sus compañeros y abandona la pensión para pasar unos días en Veracruz, al lado de Teresa, la cual sigue sufriendo por el amor de José Luis, el cual finalmente queda divorciado de Mónica y es rechazado por sus hijos, los cuales no quieren volver a saber de él. Sin embargo con el tiempo Romina lo vuelve a ver y lo perdona, por lo que tienen comunicación, a la vez que ella se vuelve muy cercana a Nubia, la cual logra hacer amistad con Mónica y visita a esta y sus hermanos constantemente, sola o con Gibrán, el cual con sus ahorros comienza su proyecto para abrir una escuela de natación. 
 
En prisión, Diana le pide perdón a Fernando, asegurando que todo lo hizo por amor, pues él siempre fue el hombre de su vida y solo tuvo ojos para Helena, quien se lo arrebató. El hombre cree que la mujer está loca y sin embargo la perdona. Se despide de ella para siempre no sin antes pedirle que se olvide de él y su hija, Ilithya, quien se niega a aceptar que su tía sea una asesina y llora pues todas las desgracias se le han juntado. Se refugia en Celeste y Darío, quien cansado de rogarle a la chica, se acerca a Ilithya y comienzan una relación sensata y limpia, gracias a la cual la muchacha se acerca cada vez más a Fernando, quien como regalo de graduación le propone que hagan un viaje juntos, partiendo al extranjero, no sin que antes la hija haga las paces con Celeste y ambas busquen a Nubia para pedirle perdón por los malos momentos que le hicieron pasar. 
 
Yareni da a luz un hijo al que Humberto desea reconocer, dando su apoyo incondicional a la chica, a la que lleva a vivir a su casa. Luego busca a Vicente y le pide perdón por no haber podido hacer más para salvar a su esposa, hace años. También se disculpa con Gibrán, en nombre de Roger, puesto que ha quedado comprobado que su hijo fue un caso perdido e hizo daño a causa de su insensatez. El muchacho le da la mano y le asegura que ya no hay rencores ni resentimientos. Luego acude a Lino, el cual le dice que la rectoría de la Universidad ha decidido darle una distinción y le pide que trabaje para la institución. El muchacho sin embargo se retracta, pues desea prepararse todavía más para las próximas olimpiadas y ayudar a otros chicos a cumplir sus sueños, en su escuela de natación. Se reúne con su amada Nubia, a la que promete que de ahora en adelante nada le impedirá ganar en todo lo que se proponga y la hunde en una alberca, acompañándola, decidido a enseñarle lo que es vivir en el agua. Le pide que venza el miedo, para luego darle un fuerte beso de amor que simboliza la victoria de ambos ante su propio reto al destino.







 

















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